domingo, 20 de julio de 2014

Una Piedra en el Camino






Durante estos tres últimos días se ha disputado en Baena (Córdoba) el XXV Campeonato de Andalucía de Natación de Jóvenes Nadadores. 

Son muchos los jóvenes que se esfuerzan cada día por intentar hacer realidad sus sueños. Pero, a día de hoy, valoro muchísimo más que los resultados deportivos, aquellos que tienen que ver con el esfuerzo, el trabajo, la disciplina, el compañerismo, la risa, el llanto, … en definitiva, … las grandes pasiones humanas.

Nadadores, entrenadores y clubes, han puesto todo de su parte para dar de sí lo mejor que cada uno tiene, y eso, en los tiempos que corren, tiene un valor y un mérito incalculables. Todos ellos han contado con el apoyo y aliento de sus familiares.

Sin embargo, hemos echado en falta por parte de la organización ese toque de sentido común que indica que en pleno mes de Julio en la provincia de Córdoba las temperaturas son elevadas y que, por tanto, la organización tiene que prever que si hay una piscina aledaña a la de las pruebas, que esta piscina esté habilitada para que los pequeños que acompañan a sus hermanos puedan hacer uso de la misma, ante las elevadas temperaturas. Así mismo, los aseos y lavabos deberían estar habilitados, abiertos y limpios, a lo largo de todos los días que dura dicha competición. Y ni que decir tiene que, el personal a cargo de velar por el correcto desarrollo del evento, tenga un mínimo de competencia personal y ética, cosa que también ha dejado mucho que desear.

Quedémonos con lo positivo: las pruebas deportivas han estado a la altura de la competición. Jueces, árbitros, clubes, entrenadores y nadadores han dado lo mejor sí. Pero, no olvidemos que con un poco de sentido común, las cosas brillarían aún más.

Mi más sincera enhorabuena a todos los participantes en el campeonato. Y también, a vosotros, padres y madres, pues vuestro apoyo incondicional hace que todo el esfuerzo de los pequeños tenga aún más valor. Felicidades a todos.


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